miércoles, 13 de mayo de 2009

Amigos que te provocan buen rollo

Pedro está en mi lista de amigos que emanan buen rollo. Da lo mismo lo difícil que esté siendo el día, el cúmulo de trabajo que tengamos por delante, que sólo ver a Pedro me invade una sensación de calma, de tranquilidad y un buen rollo inmediato.
Es lo que más echo de menos en el trabajo desde que se fue a París: esas conversaciones banales que amenizaban cualquier café, unas risas por cualquier detalle sin importancia, saber que en un momento de agobio podía ir a su despacho y en un par de minutos todo sería mejor, más fácil, más calmado.
Mi nuevo despacho en París está a tres o cuatro del suyo... y me llena de ilusión saber que podré recuperar esa sensación de buen rollo instantanea que en los últimos meses ha brillado por su ausencia en la oficina de Madrid.

2 comentarios:

Alf dijo...

Que chaquetera!!!!!

Ya lo decían: Si quieres saber como es fulanito, dale un carguito, jajajaja

Cris dijo...

Jjejeje, cariño, lo nuestro no tiene parangón por mucho que Pedro me provoque buen rollo.