sábado, 3 de octubre de 2009

Positivo en París

Los primeros síntomas fueron malestar general, cansancio, y unos dolores muy parecidos a los pre-mestruales...entre eso y el calor del mes del agosto pasé el mes con mal cuerpo. Hubiera pensado que estaba enferma de no ser por el retraso. Yo soy muy regular, desde que era adolescente, un reloj suizo, así que con una semana de retraso yo casi no tenía dudas ...pero quería esperar a hacerme la prueba en Madrid, con Loren. Y él no quería hacerse ilusiones.
Casi era la última semana de agosto cuando no pude más: busqué en Internet e imprimí las instrucciones del test de embarazo en español -porque no me imaginaba descifrándolas en francés, sola en mi salón y con cara de panoli- y me dirigí con una foto, impresa en color, de la caja del test que quería comprar a la farmacia de mi barrio. La farmaceútica me lo puso fácil y no tuvimos ni que intentar comunicarnos en mi nulo francés.
Y salió positivo, y estaba de tres semanas o más -estos test de embarazo nuevos son una maravilla, ejjejej, es una lástima no poder conservarlos de recuerdo, porque a las 24 horas de darte el resultado se les termina la mini-pila- y nos quedamos los dos mudos de la emoción, cada uno a un lado de la línea teléfonica que unía España y París en ese momento.
Y el mal cuerpo no sólo continúo si no que se acrecentó y, se sumaron nauseas, mareos y vómitos. Pasé los siguientes quince días arrástrandome hasta que conseguí escaparme a España, ir al ginecólogo y que me recetase pastillas para mitigar los vómitos: funcionan bastante, al cabo de unos diez días había logrado vomitar sólo por las mañanas y, aunque las sigo tomando, ahora sólo es cada unos pocos días.
Celebro con un humor excelente los días buenos, que no son tantos como me gustaría, pero ya estoy de tres meses y según médicos, madres y otras víctimas de los mismos síntomas, este es el momento clave para empezar a sentirme bien y olvidarme de los ascos y los ratos malísimos. Estoy cruzando los dedos de las manos y de los pies para que sea así y empezar a "disfrutar" del embarazo.
Juro que trato de entender a todas las amigas y conocidas que me dicen que esto se puede disfrutar...de momento, para mí, con mi experiencia personal, es como tratar de disfrutar de una operación a corazón abierto: simplemente, lo encuentro complicado.

3 comentarios:

La Petite en Belgique dijo...

Felididades, Cris. Y mucho ánimo :)

Anónimo dijo...

Felicidades preciosa!!
Sigo tu blog hace tiempo y me encanta.
Hoy ha sido un buen dia para dejarte un comentario.
A.L

Pablo G dijo...

Ya se lo dije a Loren pero enhorabuena de tu ex compañero de redacción. Un abrazo y que todo vaya bien por París.
Pd. Por aquí cuidamos bien a tu querido jeje